Megacable y el desprecio a la tv pública

El Universal, Cartera, 26 de abril de 2013

Columna Telecom y Medios

Megacable y el desprecio a la tv pública

Por Gabriel Sosa Plata

En el contexto de la presentación de la reforma de telecomunicaciones, Megacable, la segunda empresa de televisión de paga más grande del país, propiedad de la familia Bours, decidió expulsar de varios de sus sistemas de televisión a canales de televisión pública, entre ellos Tv UNAM, Once Tv, Tv Mexiquense y otros, para sustituirlos por canales de más “audiencia” y, paradójicamente por los que paga para su transmisión.

Las razones de esta decisión no se han dado a conocer oficialmente, pero el hecho es interpretado por las mismas televisoras públicas afectadas como una muestra de la molestia que generó a Megacable la reforma de telecomunicaciones, en particular las disposiciones relacionadas con la retransmisión de los canales abiertos de televisión en los sistemas de televisión de paga.

El “desquite”, pues, se hizo contra las televisoras públicas, las mismas a las que también en muchas ciudades se les ha negado el acceso a los sistemas de televisión por cable porque no hay, hasta ahora, ley que los obligue, no obstante la importancia que cultural y socialmente tienen los medios públicos en el país.

Luego de darse a conocer la salida de las señales, en la primera semana de marzo, Juan Carlos Zúñiga, periodista de Telemax, escribió en su cuenta de Twitter que dicha televisora estatal “y otras tv públicas fueron sacadas de Megacable porque la cablera protesta contra el ‘must carry’ en reforma de telecomunicaciones”.

El caso Telemax es interesante por dos razones. La primera, es que a diferencia de lo que sucede con la mayoría de los sistemas estatales de televisión, opera una concesión (es decir, puede comercializar) a través de la empresa Televisora de Hermosillo, en la que participa con la mayoría de las acciones el gobierno de Sonora.

La segunda, es que el exgobernador de esta entidad, Eduardo Bours Castelo –sí, de la misma familia propietaria de Megacable-, buscó deshacerse de Televisora de Hermosillo a través de una licitación, a la que se convocó en 2009. Ante las manifestaciones de descontento y el señalamiento de que habría un conflicto de interés, debido a que Megacable podría participar en la licitación, se suspendió la venta y los sonorenses mantuvieron así a su televisora.

Desde el 5 de marzo, como si fuese un castigo, Telemax dejó de transmitirse en 19 sistemas de Megacable ubicados en prácticamente todas las ciudades importantes del estado: Guaymas, Hermosillo, Agua Prieta, Caborca, Cananea, entre otras.

A su vez, el canal de nuestra Máxima Casa de Estudios, Tv UNAM, fue sacado de los sistemas de Cananea, Salamanca, León, Querétaro, Toluca, Morelia, La Paz, Los Cabos y Nogales, mientras que Tv Mexiquense de la misma ciudad de Toluca, Villa del Carbón, Tlalnepantla, Chalco, Temascancingo, Acambay, Colorines, Valle de Bravo, entre otras regiones.

Otra de las afectadas fue Telemichoacán, la televisora del Sistema Michoacano de Radio y Televisión, que salió de prácticamente todas las ciudades del estado en las que Megacable tiene presencia, incluida Morelia. Lo mismo sucedió con el Canal 10 de Chiapas, dependiente del Sistema Chiapaneco de Radio y Televisión.

En tanto, el canal 9 de la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión, ya no se puede ver en los sistemas de Megacable en Matías Romero, Huatulco y Salinas Cruz. Y el canal de la televisión poblana, del Sistema de Información y Comunicación del Estado de Puebla (SICOM), salió de la cablera localizada en la capital. Las televisoras públicas de Hidalgo y Morelos, así como Aprende Tv, de la Secretaría de Educación Pública (SEP), también recibieron el mismo trato en diferentes ciudades.

Las protestas de los suscriptores por estas expulsiones no han dejado de hacerse. Baste advertirlo en redes sociales. Sin embargo, la presión de los veracruzanos fue tal que Megacable reculó y reinstaló la semana pasada la señal de Tv Más, de Radio y Televisión de Veracruz, en las siete ciudades, incluida Xalapa, consideradas originalmente en el recorte.

Pese a la gravedad del asunto, llama la atención el silencio de la Red de Radiodifusoras y Televisoras Culturales y Educativas de México, que defiende los intereses de los medios públicos, así como de la mayoría de los responsables de las televisoras públicas perjudicadas.

MUST CARRY, MUST OFFER

También llama la atención el doble lenguaje de la empresa. Al tiempo que decide expulsar de sus sistemas a más de una decena de sistemas de televisión pública por no estar de acuerdo con la reforma, la celebra en el discurso. “El ambiente será mucho mejor con la reforma y se podrán hacer más cosas de las actuales, con un suelo más parejo tanto en el mercado de Tv de paga como en el de telecomunicaciones”, declaró a un diario el director general de Megacable, Enrique Yamuni.

Con la reforma, empresas como Megacable ya no deberán pagar, como ahora sucede, a Televisa o Tv Azteca por retransmitir sus canales en las zonas de cobertura de sus señales, pero también estarán obligadas a retransmitir, gratuitamente, los canales ubicados en las regiones donde prestan sus servicios, incluidos los de las televisoras estatales, así como los canales de la federación, lo que ya no gustó a todos los empresarios del sector.

De esta manera, las televisoras públicas expulsadas podrán regresar a Megacable y muchas otras tendrán la oportunidad, por primera vez, de tener presencia en la televisión de paga, un medio que ya cuenta con 13 millones de suscriptores en el país. Sin embargo, esto sucederá hasta que se constituya el Instituto Federal de Telecomunicaciones, lo que no ocurrirá tan pronto como quisiéramos.

http://www.eluniversalmas.com.mx/columnas/2013/04/101244.php